Controversial, sexy, atrevida, guapa, famosa, sensual, revolucionaria... ella habla alto y claro, así es Kate Rodríguez, famosa modelo y presentadora panameña que está triunfando en la TV de Argentina.
Mudarse a probar suerte a un país que no conoces, ya es de por sí difícil. Hacerlo sola, con poco dinero y casi nulos contactos, más todavía. Para Kate Rodríguez la vida no le fue nada fácil y es una sobreviviente, no solo del entorno social en el que se crió, sino de su propia familia, padre y madre ultra católicos que casi se envenenan de ira cuando una Kate rebelde y adolescente les dijo que no quería ir más a la Iglesia.
Arribó a Argentina llena de sueños desde Samaria: “Mucha gente hoy lleva la bandera de ‘crecí en un lugar humilde y peligroso’, como que estuvo feliz, yo no fui feliz. Mi barrio era una favela, se robaba, había asesinatos alrededor de mí. No fue lindo el futuro y siempre supe que no quería estar ahí”, contó a Infobae.
El día en que Rodríguez se negó a ir a la Iglesia frente a sus padres, ellos reaccionaron echándola del hogar. Le pusieron sus cosas en dos bolsas y Kate no tuvo otra opción que salir y deambular por la calle, sin dinero y sin saber a dónde ni a quién recurrir. Así se pasó tres días, hasta que su abuela la rescató y la llevó a vivir con ella.
Durante ese tiempo, pudo terminar la escuela y luego trabajó en una financiera. Destinaba parte de su sueldo a su hogar y el otro para ahorros, quizás palpitando en volantazo que daría tiempo después.
"Recibí mucha violencia dentro de mi casa. Veía a mi papá predicando al amor y a la institución familiar y después en la casa me mataba a palos. Era una mentira, me crié bajo una mentira", reveló sobre sus padres, con quienes estuvo casi 10 años sin hablarse. "De chiquita mi papá me decía que hay un lugar especial dentro del infierno para la gente que se dedica a la televisión, a la actuación o lo artístico. Irónicamente fue a lo que me dediqué", contó.
En los años que vivió con su abuela, Kate miraba videos de Showmatch por Youtube y soñaba con estar ahí. Tanto fue así, que un día armó sus valijas y emprendió viaje, despidiéndose de su amada abuela, quien la había salvado en el peor momento de su vida.
Desde ese momento, la panameña no paró: conducciones en los canales Quiero, TyC Sports, participaciones en programas como Polémica en el Bar y El gran premio de la cocina y como actriz en El Marginal, entre otras cosas.
El actual desafío que está atravesando Rodríguez es su participación en El Hotel de los Famosos, un reality donde dieciséis participantes permanecerán aislados en un hotel especialmente diseñado y con todas las comodidades durante dieciséis semanas de convivencia, competencia, eliminaciones y donde solo un ganador se llevará el gran premio.
“Expectativa ninguna, cero, quiero ir a divertirme, hacer amigos, pasarla bien. Mi arma letal en la competencia es mi personalidad. Soy muy ordenada y obsesiva con la gente que no usa el sentido común. El trabajo que odiaría hacer es limpiar baños y como huésped no soy sucia, trato de dejar todo prolijo. Me gustaría compartir habitación con alguien que no ronque”, así se presentó la panameña.
¿Y si gana?
Kate ya sabe a qué destinará el dinero si llegara a ganar el premio: iría a visitar a su abuela, aquella que la buscó y la rescató de la calle, a quien en gran parte le debe su presente artístico y su prometedor futuro.